Un aspecto vital que no debemos olvidar cuando nos decidimos a levantar nuestro negocio es la creación de imagen de marca. Pero, ¿qué significa eso? Según la definición de Wikipedia, imagen de marca es “el conjunto de representaciones mentales, tanto cognitivas como afectivas, que una persona o un grupo de personas tiene frente a una marca o una empresa”.
Ahora lo vamos a explicar de una forma mucho más sencilla. La imagen de marca es la carta de presentación de nuestra empresa, de los servicios o productos que ofrecemos y tiene que ser exhaustivamente cuidada y mimada.
Igual que cada día nos peinamos, arreglamos e hidratamos nuestro cuerpo para que nuestra imagen personal luzca en perfecto estado, exactamente lo mismo hemos de hacer con la imagen de marca de nuestra empresa. No olvidemos que es la que nos va a acompañar desde nuestros inicios al objeto de generar confianza y credibilidad entre nuestros clientes o seguidores. Además, hará que nos diferenciemos de nuestra competencia.
Pero para crear una imagen de marca que despierten emoción y sentimientos en nuestra audiencia hemos de tener muy claro quiénes somos como marca.
¿Quiénes somos como marca?
Para poder esclarecer quiénes somos como marca hemos de hacernos unas preguntas claves:
- ¿Cuál es nuestra misión y por qué?
- ¿Cuáles son nuestros valores, es decir, que creencias impulsan a nuestra empresa?
- ¿Qué tipo de personalidad tendrá nuestra marca?
- ¿Qué nos hace diferentes a la competencia?
- ¿Cómo queremos comunicarnos con nuestros clientes?
Toda vez tengamos definidas estas cuestiones, podemos comenzar a construir nuestra identidad de marca y trabajaremos en esta línea, evitando siempre generar una apariencia negativa de nuestra imagen.
Ejemplos de identidad de marca ‘potentes’
Ya hemos dicho que lo que verdaderamente diferencia a una marca de otra son sus valores y las emociones que transmite. Para ello, vamos a citar algunos ejemplos de marcas que lo han logrado con creces:
Coca-Cola: Su imagen de marca se basa en la felicidad. Es el refresco de la felicidad, es decir, Coca-Cola va más allá de ser una de las bebidas más consumidas del mundo. Pretende, y lo logra de hecho, ser una marca con la que sus consumidores se sienten plenamente identificados, asociada a los placeres de la vida y al optimismo.
Apple: Su imagen de marca se asocia instantáneamente con calidad e innovación tecnológica. La empresa de la manzana ha logrado posicionarse como la mejor marca tecnológica del mundo
Nike: Su imagen de marca está directamente relacionada con superación y esfuerzo
BMW: La imagen de marca de este grande de la automoción es rápidamente asociada con deportividad, mientras que Mercedes la situamos como sinónimo de calidad.
Si nos sentimos representados por alguno de estos valores que confieren cada una de estas marcas, lo normal es que empaticemos con ellas y, por tanto, prefiramos la consumición de sus productos antes que de cualquier otra marca.